Este es el momento dorado del Cloud computing, y aquí explico el porqué.
La coyuntura mientras escribo esto es: el teletrabajo, la educación virtual y el ecommerce son obligatorios. La famosa transformación digital ya no es una opción sino que es un camino a recorrer inevitable.
Ahora más que nunca, para el cliente interno, cliente externo y consumidor el lugar donde están alojados sus datos o donde se procesa la información tiene menos importancia. Mientras se puedan acceder y se procesen.
Al mismo tiempo, los administradores de las plataformas proveedores de estos datos e infraestructura on-premises están igual de encerrados que todos nosotros.
Ayer el riesgo de que se caiga mi plataforma digital provocaba que uno de mis canales de consumo se caiga pero el resto (que era justo mi fuerte) sigan trabajando. Hoy si las plataformas digitales se caen simplemente mi único canal de supervivencia se cae. Esto ya no es una llamada de atención a sistemas, es que el negocio deja de funcionar en todos sus ámbitos y áreas.
La redundancia, alta disponibilidad, seguridad y la inmediatez que me pueden ofrecer los Cloud Providers son la mejor opción hoy en día. Atravesar el camino de alta disponibilidad y redundancia on-premises en este momento es más difícil que antes aunque los presupuestos empiecen a volcarse hacia ese lado.
La opción nube se volvió más importante ahora, algunos pensaremos en esto como sitio alterno o como Cloud First. Lo que queda claro es que Cloud es una conversación que tenemos que empezar a tener.